El escultor romano Giovanni Battista Morelli, discípulo del gran maestro Alessandro Algardi (1595-1654), trabajó en París en la corte del rey Luis XIV (1638-1715) hasta 1659, fecha en la que solicitó apoyo a su amigo Diego Velázquez (1599-1660) para trasladarse a España.
En 1661 Felipe IV (1605-1665) lo nombró escultor del reino y permaneció en Madrid hasta la muerte del monarca. Regresaría a Valencia, pero fue llamado a la corte de Carlos II (1661- 1700) donde murió años más tarde.
Entre los primeros encargos que realizó en la Península Ibérica se encuentran los de Valencia en la cartuja de Val de Cristo o Valldecrist, que fue la quinta de la orden de san Bruno y uno de los centros religiosos más importantes de España.
El pintor y tratadista Antonio Palomino de Castro y Velasco (1655-1726) apunta en El museo pictórico y escala óptica (1715-1724), que en ese lugar Battista realizó: […] maravillosas cosas de barro en figuras redondas y de bajorrelieve. La delicada terracota de Museo Soumaya proviene de este lugar y está inspirada en el pasaje bíblico del Evangelio de Mateo (2:13), cuando José y María llevan al Niño rumbo a Egipto para salvarlo de las amenazas de muerte del rey Herodes.