Este magnífico piano se incorporó a la colección mexicana en 2002 y fue adquirido en la casa de subastas Christie’s. Desde 1957 formó parte de colecciones francesas, y se sabe que su primera dueña fue la hija del príncipe Solimán, Naciye Sultana (1898-1957), nieta del último emperador turco-otomano Abdulhamid II , quien también contaba con un piano Blüthner. En 1924 la familia de los gobernantes otomanos fue exiliada y Naciye se marchó a París. Pudo regresar a su tierra natal en 1939 y el instrumento permaneció con ella hasta pocos años antes de su muerte en Turquía.
De la prestigiada casa Julius Blüthner Pianoforte Company nacida en 1854, este piano cuenta con la patente del sistema Aliquot, un peculiar sistema de anclaje individual de cuerdas, que sumaba cuatro de ellas en la sección de tonos agudos, lo que dio lugar a un sonido más preciso, dinámico, brillante y cristalino.
La caja inglesa es de los talleres de Maple & Co. en el Totenham Court Road londinense. Los aderezos evocan el trabajo del ormolú (bronce dorado) dieciochesco y el dibujo neoclásico de pilastras, medallones, urnas y guirnaldas. Las musas siguen los modelos de Angelica Kauffman (1741-1807). Las manos de Liszt, Rosenthal, Brahms, Jadason, Mahler, Moscheles, Nikisch, Rachmáninov, Schumann y Tchaikovsky tocaron un Blüthner como éste.