El grabado en este cráneo representa una conquista para alcanzar el poder. Un personaje vestido sencillamente con un taparrabo y tocado, toma a otro que está sentado sobre un trono. Lo sujeta del pelo y lo somete, éste cruza los brazos atados sobre el pecho y pronuncia algunas palabras: derrotado. El triunfador vestido lujosamente, impresionante se posa finalmente sobre un trono con forma cabeza de reptil.