"Incansablemente. Las horas que hagan falta para la victoria".
La política de guerra incidía en la idea de que para poder ganar el conflicto era imprescindible la eficiencia en el trabajo y el aumento de la producción. Todo aquel que no era movilizado al frente de guerra debía esforzarse para aumentar su producción allí donde trabajase. Fueron las centrales sindicales, en este caso, la Unión de Empleados de Oficinas, quienes fueron responsables de la organización del trabajo.