Reproducción de unas pinzas (vulsellae) están compuestas por una varilla doblada por la mitad en lo que constituiría su zona flexora. El acabado del extremo superior tiene una curva hacia el interior por ambos lados.
Las vulsellae (pinzas) se usaban para depilarse el vello y como instrumento quirúrgico, aunque estás últimas son de dimensiones mayores.
Las pinzas que se usaban en las termas estaban más vinculadas con la depilación, con ellas se quitaba el vello facial, como se hace también ahora, y el vello corporal, aunque también se usaban a veces para la limpieza de los oídos, sacar espinas y diversos cuidados externos.
Se realizaban de diferentes metales aunque la mayoría son de bronce. En pocas ocasiones llevaban apliques de oro y plata, ya que esto era caro y no todas las mujeres que iban a las termas se lo podían permitir. También podían estar decoradas con incisiones y relieves.
Algunas veces se las relacionan con instrumentos como estiletes e incluso pequeñas sondas de oído, ya que en ocasiones se usan para las mismas funciones.