Vaso

Primeras sociedades agroganaderas

Entre 5500 y 3200 años antes de nuestra era, los grupos humanos del Sureste Peninsular utilizan una amplia gama de recursos alimenticios para subsistir, tanto silvestres como domésticos. Aprovechan, además, la gran diversidad de materias primas locales para llevar a cabo las nuevas actividades.

Siguen cobijándose en cuevas, pero también construyen nuevos asentamientos al aire libre, con el objeto de permanecer cerca de los campos de cultivo. Sin embargo, mantienen la movilidad y contactos con otros grupos del interior de los valles y las sierras y de la costa, así como la ocupación intermitente de un mismo lugar.

No obstante, la consolidación del proceso por el que las poblaciones se establecen de manera definitiva en pequeñas aldeas principalmente localizadas en los valles, se produce en los últimos mil años de este período.

Estas comunidades localizadas en entornos fluviales, encrucijadas y pasos naturales ocupan, de forma temporal y reiterada, antiguas cuevas y abrigos naturales como Cueva Ambrosio (Vélez Blanco), Cueva Humosa (Olula del Río) o Zájara (Cuevas del Almanzora ).
Asimismo, instalan sus campamentos y aldeas, cada vez más numerosas y extensas, al aire libre, en suaves lomas o altos cerros.
Sus cabañas son construcciones de entRamado vegetal y barro, soportadas por troncos de madera que sostienen también la techumbre. Junto a ellas construyen estructuras, como silos, depósitos de agua y pequeños canales de desagüe.

Además en este periodo nos encontramos con un invento extraordinario: la ceramica.

Vaso cerámico de pequeñas dimensiones, de forma elipsoidal con la altura superior al radio. Presenta en una de sus caras dos perforaciones oblicuas para la suspension, separadas 0,7 cms. entre si y que atraviesan la pasta exterior. Fue encontrado en el interior de una vasija de almacenamiento de líquidos (número de inventario 83052).

Materia/soporte: Cerámica
Procedencia: Zájara, Cuevas del Almanzora (Almería)
Excavación, Cámalich Massieu, Mª Dolores