Este término es la abreviatura de “arte óptico”, que hace referencia a la pintura y escultura que hacen uso de las ilusiones y los efectos ópticos de los procesos perceptivos. Un escritor lo utilizó por primera vez en un artículo anónimo de la revista Time el 23 de octubre de 1964 y pasó a utilizarse de forma habitual como la denominación, en particular, de estructuras bidimensionales con intensos efectos psicofisiológicos. En 1965, William C. Seitz organizó la exposición The Responsive Eye (El Ojo Sensible) en el Museo MOMA de Nueva York, donde se exhibieron, uno junto a otro, dos tipos de incitaciones visuales que algunos artistas ya venían utilizando desde hacía tiempo. Por un lado, la ambigüedad perceptiva, que en ese momento estaba en boga en EE. UU. y que se consigue a través de superficies de color, y por otro, la sugerencia coactiva de movimiento, que muchos artistas europeos interesados en el arte cinético usaban y que se obtiene mediante líneas y formas en blanco y negro. Los artistas destacados del Op son Victor Vasarely, Bridget Riley, Jesús Soto, Yaacov Agam, Carlos Cruz-Diez, Julio Le Parc y François Morellet.