Las cocinas regionales del interior

Recetas contundentes y sabrosas, llenas de tradición e historia.

De Real Academia de Gastronomía

Real Academia de Gastronomía

Botillo del BierzoReal Academia de Gastronomía

Platos de caza, de cuchara, productos de matanza, guisos de verduras, asados y hasta casquería. La cocina regional del interior de España presume de una rica y variada despensa que se plasma en recetas contundentes y sabrosas, llenas de tradición e historia.

Salteado de setas y patatasReal Academia de Gastronomía

Castilla y León, tierra de asados y de setas

Castilla y León está formada por nueve provincias y, aunque todas tienen sus particularidades gastronómicas, también presentan puntos en común. Uno de ellos, la contundencia de sus guisos; otro, los asados, un hilo conductor en toda la Comunidad.

Cochinillo asadoReal Academia de Gastronomía

Es el destino por excelencia para disfrutar de un buen cordero o cochinillo asado al horno, perfectamente preparado con su carne tierna y su piel crujiente. La liebre, el conejo o la perdiz también son habituales en sus mesas, haciendo de la caza otro de sus distintivos de calidad. Las carnes frescas de Ávila y Salamanca, así como el lechazo de Segovia, cuentan con Indicación Geográfica Protegida.

Recogida de trufasReal Academia de Gastronomía

Además, lidera la producción de setas y la provincia de Soria destaca por ofrecer la mayor calidad y cantidad de trufa negra. No en vano se celebran en la Comunidad… ¡más de 350 jornadas micológicas al año!

Alubias de La BañezaReal Academia de Gastronomía

Pucheros castellanos

Estamos en una región con una rica variedad de legumbres –la mayor productora de España- la mayoría de ellas reconocidas con certificado de calidad, como la alubia de la Bañeza-León, el garbanzo de Fuentesaúco, las judías de Barco de Ávila, la lenteja de la Armuña y la lenteja de Tierra de Campos.

Cocido MaragatoReal Academia de Gastronomía

Un recurso que se traduce en deliciosos platos de puchero, donde se combinan con carnes y matanza. Es el caso del cocido, que en Castilla y León también tiene sus versiones, como el Maragato –propio de la zona leonesa de La Maragatería- que se toma ‘al revés’, primero la carne, después la verdura y, finalmente, la sopa.

Trucha arcoírisReal Academia de Gastronomía

Sopas también hay muchas en esta tierra, fruto de sus fríos inviernos, como la sopa castellana (o de ajo), la zamorana (con base de sopa de ajo, tomates maduros y guindillas), o la de trucha del Órbigo, típica de El Bierzo (León). La trucha, es precisamente, un pescado valorado en esta Comunidad.

Tabla de embutidos ibéricosReal Academia de Gastronomía

Embutidos y matanza

La cocina de Castilla y León está estrechamente relacionada con los trabajos de campo y el clima frío de los meses de invierno, de ahí que sus productos y recetas sean potentes. Es el caso de los embutidos, muy relevantes en estas provincias. Se usan para los guisos de legumbre, las sopas, empanadas o platos populares como las migas, preparadas con pan, ajo, embutidos y partes del cerdo, como la panceta.

Botillo del BierzoReal Academia de Gastronomía

El botillo del Bierzo (que se toma cocido y acompañado de patatas), la cecina de León y el chorizo de Cantimpalos cuentan con sello de calidad, pero son muchos otros los que se valoran como la morcilla de Burgos o el farinato de Salamanca. Precisamente esta última ofrece unos embutidos de gran prestigio, los de Guijuelo, donde también se produce un jamón de altísima calidad.

HornazoFuente original: dimequeesviernes.com

Los embutidos también son parte de una de las recetas camperas por excelencia de Castilla y León, el hornazo. Se trata de una especie de empanada, más gruesa y rellena que la gallega, y está especialmente arraigada en Ávila, Segovia y Salamanca.

Pan de ValladolidReal Academia de Gastronomía

Con queso (pan) y vino se hace el camino

En Castilla y León se elabora la tercera parte de la producción quesera nacional, y cuenta con varias figuras de calidad certificada.  Además, ha ido recuperando su producción artesana de pan, entre ellas el popular Pan de Valladolid o la Hogaza de Zamora.

Paisaje de viñedo en el valle de AtautaReal Academia de Gastronomía

Es, por encima de todo, tierra de vinos, con Denominaciones tan reconocidas como Ribera del Duero o Rueda Pero hay mucho más en la región: Arlanza, Arribes, Bierzo, Cigales, Sierra de Salamanca, Toro, Cebreros… una enorme variedad que en cada localidad se muestra con su propia identidad.

Cabeza del QuijoteReal Academia de Gastronomía

Castilla-La Mancha: las recetas de Don Quijote

La gran obra de la literatura española, que discurre por tierras de La Mancha, es un reflejo de algunas de las recetas de más arraigo en la Comunidad.

Mural de azulejos del QuijoteReal Academia de Gastronomía

En ella se habla de perdices asadas, de olla podrida, de quesos y botas de vino: “Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches (carne picada y aderezada), duelos y quebrantos los sábados (huevos y tocino), lentejas los viernes, algún palomino (aves) de añadidura los domingos (*)” escribía Cervantes en 1605, en esta novela que ya forma parte de la literatura universal.

(*) Rico, F. (Dir. ) (1998). Don Quijote de la Mancha. Barcelona: Instituto Cervantes y Crítica (Grijalbo Mondadori).

Parque Nacional de CabañerosReal Academia de Gastronomía

Huerta, aceite, queso, pan y vino

La cocina de Castilla La-Mancha es de origen humilde, condicionada por un clima seco y caluroso y unos inviernos fríos. Es el resultado de los recursos naturales de la zona y la necesidad de elaborar platos contundentes para soportar las jornadas de labranza y trabajo en el campo.

Arroz con berenjenas de Almagro y secreto ibéricoReal Academia de Gastronomía

De su huerta son especialmente relevantes productos como las berenjenas de Almagro (Ciudad Real) y el ajo negro de Las Pedroñeras (Cuenca), ambos con sello de calidad. Las hortalizas ven en el pisto uno de sus mayores exponentes gastronómicos, un plato elaborado con tomates, pimientos y calabacín que se sirve tanto caliente como frío.

Aceite de oliva y aceitunasReal Academia de Gastronomía

El asadillo (con pimientos rojos asados, ajo, tomate y aceite) es otra muestra popular del uso de la huerta. El aceite de oliva virgen extra (con distintas DO) y el azafrán representan joyas de la cocina manchega.

MigasReal Academia de Gastronomía

El queso, el pan y el vino son tres elementos que también se revelan en las páginas de El Quijote. El primero (tanto de oveja como de cabra) y el último cuentan con sellos que certifican su calidad. El pan también forma parte de recetas tradicionales como la sopa de ajo, las migas o el gazpacho manchego, un guiso muy diferente al andaluz, y elaborado con torta cenceña (pan ácimo) que se acompaña de carnes de caza.

Ajoarriero ahumado con huevas de arenqueReal Academia de Gastronomía

Carnes, bacalao, caza y escabeches

Carnes como las de cordero son centro de guisos tradicionales en toda su geografía mientras que el cabrito es referencia de la cocina popular de Guadalajara. El bacalao alcanza gran protagonismo en elaboraciones como el tiznao (bacalao desmigado con tomate, pimiento, cebolla y ajo), el ajoarriero conquense o el atascaburras albaceteño, ambos con una base de patatas desmenuzadas.

Perdices escabechadasReal Academia de Gastronomía

La caza es una carne muy relevante en la cocina de Castilla La-Mancha, especialmente la caza menor. Judías con perdiz, arroz con liebre o los propios gazpachos son algunas muestras de cómo se utiliza este valorado recurso en la cocina manchega.

Conejo en escabecheReal Academia de Gastronomía

El conejo es uno de los productos con los que se elabora el “tojunto”, típico de Ciudad Real, y la perdiz la mejor carne para hacerla en escabeche a la toledana. También la caza es la base del morteruelo de Cuenca, con hígado de cerdo, pan rallado y especias, cuyo resultado en una pasta para untar.

Callos a la madrileñaReal Academia de Gastronomía

Madrid, cocina tabernera y casquería

Madrid, como capital y punto de encuentro, ofrece una cocina que bebe de las influencias de todas las gastronomías regionales de España. La tradición de las zonas rurales fue tomando su sitio con las migraciones que se sucedieron del campo a la ciudad por necesidades de trabajo. Se encontró así con los platillos de barras y tabernas, la casquería de las verbenas (gallinejas o entresijos) y los productos de la zona, configurándose una cocina popular propia.

Cocido madrileñoReal Academia de Gastronomía

Los callos y el cocido son dos de las recetas con apellido ‘a la madrileña’. Este último se elabora con garbanzos, diferentes carnes, verduras y embutido, y se puede disfrutar en tabernas centenarias de la ciudad, donde se sirven en diferentes vuelcos.

Restaurante HorcherReal Academia de Gastronomía

Son precisamente estos restaurantes con más de 100 años de vida –en Madrid hay más de una decena- los que permiten disfrutar de la cocina madrileña más genuina y tradicional, ofreciendo recetas que han pasado de generación en generación.

Roberto RuizReal Academia de Gastronomía

Pero, además, Madrid cuenta con una de las ofertas de cocina internacional de mayor calidad. Debido a la naturaleza hospitalaria de la ciudad, muchos han llegado para quedarse, y es difícil no encontrar una cocina foránea bien representada.

Plato del restaurante "Huerta de carabaña"Real Academia de Gastronomía

Una huerta privilegiada y carne con DNI

La región cuenta con una larga tradición de producción hortofrutícola que se concentra, principalmente al sureste de la Comunidad, en la comarca de Las Vegas, en localidades como Aranjuez, Carabaña, Chinchón, Ciempozuelos, Colmenar de Oreja o Villaconejos. E incluso tiene una marca de garantía, Huerta Villa del Prado.

Paisaje con ganadoReal Academia de Gastronomía

Además, tiene una importante producción ganadera, que se concentra alrededor de la Indicación Geográfica Protegida “Carne de la Sierra de Guadarrama”.

Viñedo en CenicientosReal Academia de Gastronomía

Vinos y aceites “De Madrid”

La tradición enológica madrileña se remonta a varios siglos atrás, pero desde hace treinta años cuenta con denominación de origen propia que ampara sus vinos. 

OlivosReal Academia de Gastronomía

Además, se tiene constancia de su producción oleícola desde el S.XIII que en la actualidad se extiende a casi 25.000 hectáreas de olivar. El resultado son aceites equilibrados, de escasa acidez, ligeramente amargos y picantes.

Conserva de ventresca de atúnReal Academia de Gastronomía

Madrid puerto de mar

Si bien Madrid no tiene mar, tiene todas las costas a más o menos la misma distancia y cuenta con el gran privilegio de ver llegar a su mercado central excelentes ejemplares de todas las zonas. Así, con igual frescura, recibe atunes, besugos o lubinas cada mañana, que llegan a las cocinas con igual garantía que en las comunidades abiertas al mar.

Restaurante "El Invernadero"Real Academia de Gastronomía

Alta cocina de interior

Las cocinas regionales de las dos Castillas también han visto evolucionar sus recetas tradicionales de la mano de la creatividad, la técnica y la vanguardia. 

Sardinas en escabeche de fresón y quesoReal Academia de Gastronomía

Pepe Rodríguez en Toledo, Fran Martínez en Albacete, Miguel Cobo en Burgos, Víctor Gutiérrez en Salamanca, Óscar García en Soria o Víctor Martín en Valladolid, son solo algunos de los cocineros que han llevado la gastronomía y los productos de la zona a las más importantes guías de restaurantes.

Cocina del restaurante CoqueReal Academia de Gastronomía

Madrid, como crisol de gastronomías que es, ofrece una cocina de vanguardia que es reflejo de la influencia cultural. David Muñoz se atrevió a reinventar el cocido madrileño con tres vuelcos de pura fusión, uno de ellos, por ejemplo, un dim sum de patata, con tuétano, col y caldo. Juanjo López en La Tasquita de Enfrente o Mario Sandoval en Coque, también son ejemplos de chefs madrileños que han sabido trasladar la esencia de este guiso a sus mesas de alta cocina.

Cerdos ibéricos en la DehesaReal Academia de Gastronomía

Cocina regional de Extremadura

Situada al oeste de España, sus dos provincias limitan con Portugal, una circunstancia que hace que en Extremadura exista una influencia del país vecino, también en gastronomía. Sin embargo, esta Comunidad es especialmente valorada por dos grandes productos de la despensa nacional: el queso y el jamón.

Torta del CasarReal Academia de Gastronomía

En cuanto al primero, son famosos el de la Serena y la torta del Casar, ambos con Denominación de Origen, así como el queso Ibores. El segundo también cuenta con sello de calidad, siendo las piezas de la Dehesa de Extremadura unas de las más valoradas de España. Extremadura es también tierra de vinos, e incluso de cavas, que resultan el complemento perfecto para acompañar estos dos tesoros gastronómicos.

Picota del JerteReal Academia de Gastronomía

Además, del Valle del Jerte proviene una de las mejores cerezas del mundo que cuenta, también, con Denominación de Origen Protegida.

Presa de paleta de cerdo ibérica, salsa de limón y rabo caramelizado.Real Academia de Gastronomía

La tierra de Extremadura no solo ofrece uno de los mejores jamones ibéricos del mundo, sino variedad de cortes exquisitos de estos ejemplares, como la pluma, el secreto o la presa. Carnes que se unen a otras como la caza (perdices, conejos liebres o ciervos) o el cordero, que se prepara tanto asado como en caldereta.

View of the Convent of San José in Saragossa set alight after bombing by the invading French army during the Napoleonic war in Spain (1808–14) de Fernando Brambila|Juan GalvezThe Metropolitan Museum of Art

La cocina extremeña tiene influencias árabes, cristianas y judías pero ella también dejó su huella, nada menos que en la gastronomía francesa. Durante las batallas napoleónicas, fue asaltado el convento de San Benito de Alcántara, cuyos pergaminos se usaron para hacer cartuchos. Sin embargo, uno se salvó, aquel que contenía un recetario local del que Escoffier llegó a decir que fue “el mejor trofeo, la única cosa ventajosa que logró Francia de aquella guerra”.

Créditos: reportaje

Texto: Silvia Artaza, con la colaboración de Dr. D. Antonio Mateos (Presidente de la Academia de Cultura Gastronomica de Castilla-la-Mancha, Julio Valles (Presidente de la Academia Castellana y Leonesa de Gastronomia y Alimentación), Francisco Sauco (Presidente de la Academia Extremeña de Gastronomia), Luis Suárez de Lezo (Presidente de la Academia Madrileña de Gastronomia).

Imagen: Imagen: Foods&Wines from Spain/ICEX / David de Luis / restaurante Horcher / Punto MX / Huerta de Carabaña / El Invernadero (Rodrigo de la Calle) / Restaurante Coque.

Agradecimientos: Rafael Ansón, presidente de la Real Academia de la Gastronomía; Elena Rodríguez, directora de la Real Academia de la Gastronomía, María García y Caroline Verhille, colaboradoras de la Real Academia de la Gastronomía.

Real Academia de la Gastronomía

Esta exposición forma parte del proyecto de Gastronomía Española coordinado conjuntamente por Google Arts & Culture y la Real Academia de la Gastronomía.

Créditos: todos los contenidos multimedia
En algunos casos, el reportaje destacado es obra de un tercero independiente y no siempre representa los puntos de vista de las instituciones indicadas a continuación, que son las que han proporcionado el contenido.
Ver más
Página principal
Descubrir
Jugar
Cercano
Favoritos