Abraham, junto con su hermano Jacob, tomó las primeras lecciones de pincel en el taller de su padre Leendert van Strij y continuó su formación con Joris Ponse (1723-1783). Perteneció al Gremio de San Lucas de Dordrecht, que años más tarde logró dirigir.
Visitó la Real Academia de Bellas Artes de Amberes, Bélgica y a su regreso a los Países Bajos en 1774, fundó la Sociedad de Dibujo y Pintura. En ese momento abandonó los paisajes para dedicarse a los bodegones. En el ocaso del Siglo de las Luces, Van Strij atrajo de nuevo la mirada a los artistas del setecientos. La atmósfera de Johannes Vermeer (1632-1675) envuelve esta escena de meticuloso registro cotidiano.
Como es su costumbre dispone un cuadro en el cuadro. Así, el delicado y moderno paisaje con vacas que cuelga sobre el muro, es testimonio de los nuevos estilos que llegan a Dordrecht de Amberes y Ámsterdam. Curiosamente el motivo pastoril fechado entre 1750 y 1800, con los mismos siete animales, lo llevó al gran formato que, registrado con el número 2547, se presenta en la Galería Nacional de Londres, Reino Unido. Esta composición siguió las soluciones plásticas de Albert Jacob Cuyp (1620-1691).
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