Las calacas de Posada
La costumbre indiscutible de la obra de Posada son sus “calaveras”, género gráfico y periodístico ya en boga desde los años ochenta del siglo XIX, estimulado por las tradiciones y supersticiones católicas del día de muertos, y vigorizado por la moda del Don Juan Tenorio de José Zorrilla.
Las nuevas calaveras del amor (1913/1913) de José Guadalupe PosadaMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
Gracias a las “calaveras” el humor popular conoce su gran zona de impunidad: si la muerte es la gran niveladora, su premonición dibujada y versificada facilita críticas devastadoras y panoramas corrosivos (…)
Posada aprovecha esta ganancia y la convierte en uno de los grandes paisajes alucinantes del arte mexicano.
"José Guadalupe Posada, Crónica de un cronista" (2014) de VideoMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
En 2013, el Museo del Estanquillo dedicó una exhibición a José Guadalupe Posada.
El gran comelitón de calaveras (1900) de José Guadalupe PosadaMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
Se sabe que, en su juventud, estudia en la Academia Municipal de Dibujo de Aguascalientes. Un documento de 1867 le atribuye al joven de 15 años el “oficio de pintor”.
El joven artista se inicia en la política en 1869, a la temprana edad de 17 años, en el bando liberal, como simpatizante del Club Chávez de Aguascalientes.
Los primeros dibujos de Posada son las caricaturas de combate publicadas en 1871 en El Jicote, un periódico satírico (con un tiraje de 300 ejemplares) editado por el impresor José Trinidad Pedroza.
Aquí están las calaveras de Don Folías y el Negrito… (1900/1900) de José Guadalupe PosadaMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
Este periódico ataca a Gómez Portugal y apoya al terrateniente Carlos Barrón, quien, a nivel nacional, está alineado con Porfirio.
Así, el dibujante entra al mundo del arte, la política y el periodismo como un editorialista gráfico en una publicación porfirista de combate.
Calavera de la Catrina from the portfolio 36 Grabados: José Guadalupe Posada (c. 1910, printed 1943) de José Guadalupe PosadaThe Museum of Fine Arts, Houston
Parte de la crítica que Posada hizo a la sociedad mexicana de la época queda en la figura de La Catrina, cuyo nombre original era "La Calavera Garbancera", creada en 1913.
Gran Fandango y Francachela (1900) de José Guadalupe PosadaMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
Garbanceros se les llamaba a aquellos de origen indígena que pretendían ser europeos, es decir, que renegaban de su cultura.
Leopoldo Méndez
No únicamente se conservan en el Museo del Estanquillo calaveras de José Guadalupe Posada. Hay otros artistas como Leopoldo Méndez que utilizaron a las calaveras como imagen para representar la desigualdad y las carencias del pueblo mexicano.
Estas creaciones de Leopoldo Méndez servían para ilustrar las "calaveras" del día de muertos del Taller de Gráfica Popular (TGP).
Leopoldo Méndez en el Estanquillo (2014) de videoMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
El Museo del Estanquillo celebró el legado artístico de Leopoldo Méndez con una exposición en 2015.
Además fue uno de los artistas fundamentales del México posrevolucionario. Fue miembro destacado del movimiento Estridentista –la avanzada de las vanguardias artísticas en nuestro país– y activista de la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios (LEAR).
“Calavera” de los pobres millonarios (1945/1945) de Leopoldo MéndezMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
También fue fundador y director del Taller de Gráfica Popular (TGP) y es considerado por muchos historiadores una figura clave de la Escuela Mexicana de Pintura.
Fue un grabador virtuoso, a la vez poderoso y exquisito, que hizo escuela y marcó a varias generaciones de artistas gráficos. Buscó divulgar y popularizar el arte y se esmeró en hacer de México un país mejor.
Arcos y charcos (1951/1951) de Leopoldo MéndezMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
Toda su vida trabajó para lo que él llamaba las causas “progresistas”: apoyó las causas populares, democráticas y nacionalistas a la vez que combatió al fascismo y sus aliados.
Su postura tuvo una calidad ética incuestionable que trascendió nuestras fronteras.
Otros autores
También en las colecciones de Carlos Monsiváis hay piezas de artistas como Andrés Audiffred, uno de los más importantes caricaturistas del siglo XX en México.
Día de muertos (1930/1930) de Ernesto García CabralMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
Ernesto García Cabral se dedicó a retratar la sociedad mexicana de la época y también lo hizo en torno al Día de Muertos.
La Calavera de Don Juan Tenorio (1913/1913) de Manuel ManillaMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
De Manuel Manilla también se encuentran piezas en la colección del museo. Este artista también pinto a la muerte en situaciones cotidianas.
Aquí les traigo su rollo de secas y montoneras endiabladas calaveras que se salieron del hoyo (1900) de Alberto BeltránMuseo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis
Las calaveras en las colecciones de Carlos Monsiváis ejemplifican la forma en que los mexicanos vemos a la muerte, como algo que forma parte de nuestra existencia y a la que mostramos respeto pero también humor.