Las obras en esta exhibición fueron creadas entre los siglos XIV y XIX en los reinos que actualmente conforman España y otros países europeos. En ese tiempo se desarrollaron importantes procesos de transformación social y política, que repercutieron en el descubrimiento y desarrollo de nuevas técnicas y formas de representación plástica.
Primitivos valencianos
Entre las pinturas más antiguas de esta colección se encuentran obras de artistas ibéricos conocidos como los primitivos valencianos. Algunas características que se aprecian en esta piezas son: estilización de las figuras, elegancia y amaneramiento en los gestos y posturas, ausencia de dramatismo, riqueza del color, excelente técnica en el dibujo y representación de espacios tridimensionales y paisajes, en los que se perciben elementos anecdóticos.
Influencia flamenca en España
Desde el siglo XIII, los viajes a Flandes de artistas españoles influyeron de manera especial en la pintura española que, junto con las tradiciones de cada región, desarrollo una corriente conocida como hispanoflamenca. Estas tablas, principalmente destinadas a conformar retablos, se caracterizaron por el trabajo del estofado y el punzando en metales, además del uso del temple y a la introducción del óleo como técnica pictórica.
Aunque esta pieza es muy posterior a los primitivos valencianos vistos en la sección anterior, demuestra la evolución en algunas de las características de la pintura valenciana a finales del siglo XV.
Pintura del Renacimiento
El renacimiento se desarrolló en Europa entre los siglos XV y XVII. Tuvo por propósito retomar el arte clásico de Grecia y Roma, aunque con diferentes intenciones, motivos y técnicas. El renacimiento puso énfasis en el ser humano y la naturaleza como reflejo de los divino y sagrado. Sus exponentes buscaron armonía, equilibrio y riges en las formas, aspectos que ejemplifican estas obras.
Pintura Barroca de la Colección Arocena
El estilo manierista se manifestó a fines del siglo XVI en el arte europeo, cuando los pintores exageraron las formas renacentistas y dotaron de mayor movimiento a sus figuras, creando nuevos efectos visuales. Poco tiempo después surgió el estilo barroco que se convirtió en el arte representativo de la Contrarreforma. Se caracterizó por su trazo enérgico, la fuerza y contraste de colores, la profusión ornamental, el movimiento y la relación entre lo divino y lo mundano, aspectos que pueden apreciarse en varias de las siguientes obras.
Iconos: imágenes sagradas
La palabra icono significa imagen, retrato o representación. La elaboración de iconos se remonta al imperio bizantino, y al surgimiento del cristianismo ortodoxo en la zona geográfica que actualmente ocupan países como Grecia, Turquía y Rusia. La función y factura de estas imágenes de culto cambió de acuerdo a cada época y región. Los iconos que podemos apreciar en esta sección fueron realizados en Rusia en el siglo XVIII.