Alegoría de Maximiliano y Carlota frente a la Virgen de Guadalupe (1864-1869) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
Maximiliano de Habsburgo y su esposa Carlota Amalia llegaron a México el 12 de junio de 1864, pero ya eran conocidos antes de su arribo.
Maximiliano de Habsburgo (ca. 1863) de Hermanos GhémarFundación Televisa / Exposiciones
En 1863, un año antes de desembarcar en el puerto de Veracruz, la imagen de la pareja imperial comenzó a colmar la imaginación de sus nuevos súbditos gracias a la abundante cantidad de ilustraciones y fotografías que circulaban en distintas publicaciones de la época.
Alegoría de Maximiliano y Carlota (1864-1869) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
Aprovechando las ventajas que ofrecían —en términos de reproductibilidad, comercialización y distribución— formatos como las cartes de visite o tarjetas de visita, la imagen de los monarcas fue difundida masivamente durante el Segundo Imperio.
Carlota Amalia de México (ca. 1866) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
Parte propaganda, parte moda, sus retratos participaron de la ola de coleccionismo generalizado en la sociedad decimonónica, de la que los relucientes monarcas se sirvieron para legitimar su poder.
Maximiliano I de México (ca. 1866) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
En el Segundo Imperio (1864-1867), la corte francesa trajo consigo a varios fotógrafos extranjeros, entre los que destaca François Aubert (1829-1906). Aubert asistió a la Escuela de Bellas Artes de Lyon, su ciudad natal, donde estudió con el pintor Hippolyte Flandrin.
Héroes de la Segunda Intervención Francesa y el Segundo Imperio Mexicano (1867) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
Durante su estancia en México, el fotógrafo francés retrató a los protagonistas de la época: Benito Juárez, Porfirio Díaz, Miguel Miramón, Tomás Mejía; a damas de la corte y escenas de la vida cotidiana.
Simpatizantes mexicanos de Maximiliano en Querétaro (1867) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
En 1867, Aubert documentó el arresto de Maximiliano y tomó fotografías de sus simpatizantes mexicanos en Querétaro, el Gran Teatro Iturbide —donde el Consejo de Guerra lo condenó a muerte–, y del Convento de las Capuchinas –sitio en el que estuvo preso.
Pelotón de fusilamiento de Maximiliano I de México (1867) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
También, documentó el fusilamiento de Maximiliano en el Cerro de las Campanas, Querétaro, tomando fotos del pelotón de fusilamiento, las ropas que vestía –manchadas de sangre y perforadas por los disparos durante la ejecución—, y del cadáver depositado en un ataúd.
Camisa de Maximiliano (1867) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
Las imágenes de la ropa con la que murió el emperador, de su cuerpo torpemente embalsamado, o del sitio de la ejecución, son hoy en día vestigios que nos permiten acceder a un renglón de la historia del siglo XIX mexicano.
El cadáver del emperador Maximiliano I de México (1867) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
El fusilamiento de Maximiliano significó tanto la caída del Segundo Imperio como el triunfo de la República. En 1901, este acontecimiento fue rememorado con la inauguración de una capilla expiatoria en el Cerro de las Campanas.
Benito Juárez (1864-1869) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
En 1967, a cien años de la entrada triunfal de Benito Juárez a la Ciudad de México, el presidente Díaz Ordaz mandó colocar, encima de la capilla, una estatua de Juárez acompañada de la frase: “Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz".
Fotos fijas de la telenovela "El carruaje" (1972) de Armando MorenoFundación Televisa / Exposiciones
En 1965, se censuró la telenovela histórica Maximiliano y Carlota por la imagen negativa que daba a Juárez. Años más tarde, Ernesto Alonso y Miguel Alemán Velasco rescataron a Juárez del “descrédito” con la producción de otra telenovela histórica, El carruaje (1972).
Reconstrucción de la ejecución del emperador Maximiliano I de México (1867) de François AubertFundación Televisa / Exposiciones
Las imágenes de Carlota y Maximiliano, realizadas por Aubert y Cía., han sido retomadas en distintas épocas y por diversos motivos. Por ejemplo, en el siglo XIX, Édouard Manet se basó en las imágenes de Aubert para realizar su cuadro La ejecución de Maximiliano (1867).
Escena de "Aquellos años" (1972) de Sergio CorderoFundación Televisa / Exposiciones
El fusilamiento de Maximiliano de Habsburgo ha dado lugar a muchas representaciones, como en la película histórica Aquellos años (Felipe Cazals, 1972).
Fusilamiento de Maximiliano (2010) de Enrique Méndez de HoyosFundación Televisa / Exposiciones
Enrique Méndez de Hoyos volvió a las imágenes de Aubert para recrear el fusilamiento del emperador en la videoinstalación en dos canales Tiempo sagrado (2010).
Maximiliano cielo (2010) de Enrique Méndez de HoyosFundación Televisa / Exposiciones
Las imágenes de Méndez de Hoyos nos recuerdan los usos históricos y políticos que han tenido las imágenes de la pareja imperial a lo largo de los siglos XX y XXI.
Helena Rojo y Paco Morayta en "Aquellos años" (1972) de Sergio CorderoFundación Televisa / Exposiciones
Innumerables son las crónicas de triunfo y derrota en las que Juárez, Maximiliano y Carlota han revivido y se han desvanecido.
Brian Aherne y Bette Davis en "Juárez" (1939) de Fotógrafo no identificadoFundación Televisa / Exposiciones
Crónicas de culto con fines expiatorios, conmemorativos o de legitimación de una memoria histórica sostenida en buena medida por la iconografía fotográfica y cinematográfica.
La exposición Maximiliano y Carlota: imágenes de un imperio está basada en un texto publicado en el libro Imaginario.Colección y Archivo de Fundación Televisa (2016).
Investigación, curaduría y texto: Cecilia Absalón Huízar
Archivo: Gustavo Fuentes
Edición y digitalización de imagen: Omar Espinoza