Esta túnica, que data de entre los siglos VIII y XIV, proviene de la costa norcentral del Perú.
Las téseras de metal se cosían sobre una pieza de tela antigua que constaba de, al menos, dos trozos independientes que estaban cosidos para formar una prenda con una parte frontal y una trasera.
El escote está decorado con dieciséis téseras rectangulares y una redonda, todas de oro.